Debido a las múltiples características físicas y químicas que posee el teflón,
con el transcurso de los años se ha convertido en un material de amplias
aplicaciones domésticas, industriales y aeroespaciales.
Entre las más
conocidas, como ya se mencionó anteriormente, se encuentran la fabricación de
cacerolas, sartenes, moldes para hornear y otros utensilios de cocina. La
industria mecánica lo emplea en la producción de engranajes y diferentes
mecanismos autolubricados. La industria automotriz, por su parte, lo utiliza
para fabricar diferentes tipos de mangueras, sistemas de airbag, frenos, filtros
de aceite, así como en las escobillas de los limpiaparabrisas para eliminar el
molesto chirrido que producen sobre el cristal cuando cae una
llovizna.
El teflón tiene también amplia aplicación en la industria
eléctrica y electrónica por su gran resistencia dieléctrica a las altas
frecuencias de la corriente alterna, su bajo factor de disipación de calor y su
alta resistencia superficial. En la práctica se emplea en el aislamiento externo
o forro de alambres y cables eléctricos, como dieléctrico para separar las
chapas de capacitores o condensadores variables de los radiorreceptores, en la
fabricación de semiconductores y, en general, como material aislante de la electricidad.
En medicina
se emplea en la fabricación de diferentes tipos de prótesis y vasos sanguíneos,
pues al ser un material inerte el organismo no lo rechaza. En óptica se utiliza
en el tratamiento de las lentes para proporcionarle cualidades antiestáticas que
evitan la atracción del polvo y las suciedades, minimizando así la necesidad de
limpiarlas constantemente.
En revestimientos de aviones, cohetes y naves espaciales debido a las grandes diferencias de temperatura que es capaz de soporta.En medicina, aprovechando que no reacciona con sustancias o tejidos y es flexible y antiadherente se utiliza para prótesis, creación de tejidos artificiales y vasos sanguíneos, en incluso operaciones estéticas (body piercing).
En electrónica, como revestimiento de cables o dieléctrico de condensadores por su gran capacidad aislante y resistencia a la temperatura.
En pinturas y barnices.
En estructuras y elementos sometidos a ambientes corrosivos, así como en mangueras y conductos por los que circulan productos químicos.
Como recubrimiento de balas perforantes.